Un grupo de 30 expertos de Holanda, Australia y Malasia revisaron hoy por última vez el lugar del siniestro. Se recopilaron "muchos restos humanos" de las 298 víctimas mortales, objetos personales y escombros.
El avión se accidentó el 17 de julio de 2014 posiblemente derribado por un misil tierra-aire, episodio del que se culpan mutuamente el gobierno ucraniano y los rebeldes prorrusos.
Todos los pasajeros y tripulantes murieron. La mayoría eran holandeses. Dos de las víctimas aún no han podido ser identificadas.