Cerca de 200 empleados de la clínica en Essen estaban llamados a parar. El sindicato verdi, sin embargo, se comprometió a garantizar que el centro tenga suficiente trabajadores para atender emergencias médicas.
Las huelgas se extenderán mañana a unos 200,000 maestros de toda Alemania. Otros 650,000 que entran en la categoría de servicio civil no tienen permitido sumarse a la medida de fuerza, por lo que no se sabe el impacto que tendrá la iniciativa.
Los trabajadores reclaman un aumento del 5.5 por ciento en los salarios y más seguridad laboral y garantías para practicantes. Otras diferencias en las negociaciones se centran en jubilación y categorías de pago para los maestros.
"Quien espere un buen trabajo de empleados cualificados tiene que pagarles de forma apropiada", señaló el jefe de verdi, Frank Bsirske, al diario "Nordwest-Zeitung" de hoy. Bomberos, policías, escuelas y universidades son de vital importancia para la sociedad, añadió.
Durante la semana hay convocadas huelgas también para trabajadores del servicio de guardacostas, funcionarios de la administración pública y equipos de reparación de la vía pública. (DPA)