Cincuenta países piden a China respuestas sobre la violación derechos de uigures

Cincuenta países, entre los que se incluyen casi toda Europa y Estados Unidos, firmaron este lunes una declaración en la que piden al Gobierno chino respuestas sobre las graves acusaciones vertidas por la Alta Comisionada de Derechos Humanos de la ONU el pasado 31 de agosto con respecto a las repetidas violaciones de los derechos de la minoría uigur.

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Xi Jinping, presidente de China, en una fotografía de archivo. EFE/EPA/WU HAO

En una iniciativa partida de Canadá y que sumó apoyos tan dispares como Turquía e Israel -pero muy pocos países islámicos, pese a ser los uigures una minoría musulmana, y casi ningún latinoamericano-, los firmantes dicen estar "preocupados porque China, hasta ahora, se niega a discutir las conclusiones (del informe de la Alta Comisionada)".

"Instamos al Gobierno de China a respetar sus obligaciones en derechos humanos y a aplicar las recomendaciones de la Alta Comisionada, lo que incluye pasos rápidos para liberar a los individuos privados arbitrariamente de su libertad en Xinjiang", señalan.

Igualmente, en esta iniciativa que ha sido pedida insistentemente por organizaciones de derechos humanos, los cincuenta países "instan a clarificar urgentemente el destino y paradero de los desaparecidos, así como facilitar (los derechos) de reunión y de contacto seguro".

Para los firmantes, el informe de la Alta Comisionada (Michel Bachelet, en su último acto antes de dejar el cargo) se hizo "de manera objetiva" y "corrobora las preocupaciones" sobre "la escala de las detenciones arbitrarias y discriminatorias de uigures y otras minorías musulmanas en China, que según aquel informe pueden constituir crímenes contra la humanidad.

Recogen así algunos de los argumentos escritos en aquel informe: vigilancia invasiva por criterios de religión y etnia, restricciones graves a las prácticas culturales y religiosas, destrucción de mezquitas, mausoleos y cementerios, tortura y malos tratos, violencia sexual y de género, incluyendo aborto y esterilización, desapariciones y trabajos forzosos: "Tales violaciones graves de derechos no pueden ser justificadas en nombre del contraterrorismo".

Hasta el momento, China no ha reaccionado a este comunicado que tuvo un número inusual de apoyos.