A pesar de que algunos análisis previos apuntaban al aumento del tráfico de ferrocarriles por la subida del precio del combustible, "el crecimiento económico estable y la creciente actividad comercial serán fuerzas impulsoras del mercado aéreo chino", aseguró Randy Tinseth, vicepresidente de márketing de Boeing Commercial Airplanes.
Los datos a este respecto admiten diferentes lecturas ya que, mientras la Administración de Aviación Civil de China (AACC) aseguró que el tráfico de pasajeros en 2010 aumentó un 16.1 por ciento respecto a 2009, la Asociación Internacional de Transporte Aéreo (IATA) destacó que dicho crecimiento se había desacelerado drásticamente en 2011 hasta quedarse en un 5.1 por ciento.
A pesar de los datos ofrecidos por la IATA, desde Boeing se mostraron optimistas y aseguraron que la compañía "es optimista a largo plazo acerca de China a pesar de las fluctuaciones".
Asimismo, Boeing prevé que el incremento anual del PIB de China se mantendrá en torno al 7 por ciento en los próximos 20 años, lo que impulsará el crecimiento del transporte aéreo en un promedio de un 7.6 por ciento anual.
El grueso de este mercado estará en los desplazamientos internos, que supondrán un 75 por ciento del volumen, lo que traerá consigo que la mayoría de aviones que el país asiático necesitará serán de un único pasillo, mercado en el que la marca estadounidense y Airbus se disputan el liderazgo.
Esta situación, según Tinshet, "no se mantendrá ya que cada vez habrá más fabricantes implicados", algo que, sin embargo, no preocupa a Boeing, ya que todos "podrán encontrar su lugar en un mercado tan grande".