Una serie de al menos cuatro explosiones y choques entre fuerzas de seguridad chinas y "rebeldes" sacudieron el domingo el distrito de Luntai, según reportó la agencia de noticias estatal china Xinhua este viernes. Hasta ahora solo se había hablado de dos muertos.
La policía se refirió a un "ataque terrorista organizado y grave". Entre los muertos hay 40 "rebeldes", seis civiles, dos agentes de policía y dos policías auxiliares, indicó Xinhua. Los agentes mataron a varios de los "rebeldes", mientras que otros se hicieron volar por los aires.
Según Xinhua se produjeron explosiones ante una tienda, un mercado y dos comisarías de policía. En ellas resultaron heridas 54 personas, 32 de ellas uigures. La emisora estadounidense Radio Free Asia habló de hasta 100 heridos, citando fuentes locales.
Uno de los rebeldes, cuyo nombre parece uigur, murió por disparos de la policía, informó la agencia estatal china. Otros dos insurrectos fueron arrestados.
Según Radio Free Asia en las zonas afectadas se impuso por el momento el toque de queda. Algunos testigos hablaron de ataques a comisarías policiales. También fueron incendiados coches policiales y una gasolinera.
Un testigo afirmó que los "rebeldes" eran posiblemente uigures, indignados por los traslados masivos a los que se están viendo obligados para dejar terreno libre a pobladores chinos.
En esta región del norte de china se están produciendo desde hace meses sangrientos enfrentamientos entre miembros de la minoría uigur y fuerzas de seguridad chinas. Los uigures, que son musulmanes, se sienten oprimidos política, cultural y económicamente por el gobierno de Pekín, que a su vez les acusa de separatismo y terrorismo.
Tras una serie de ataques ocurridos a principios de año las autoridades chinas lanzaron una dura campaña antiterrorista. (DPA)