Los industriales alemanes invirtieron 56,500 millones de euros (70,800 millones de dólares) para comprar maquinaria e instalaciones nuevas el año pasado, 500 millones de euros o un 0.8 por ciento menos que en 2012.
Los expertos vincularon el dato al reducido crecimiento del 0.4 por ciento del producto interno bruto (PIB) alemán en 2013: las inversiones son uno de los principales impulsos para la coyuntura junto a las exportaciones y el consumo privado.
La inversiones repuntaron a fines de 2013 ante la esperanza de un fin de la crisis en la eurozona y llegaron a crecer con fuerza a principios de 2014, pero la tensión con Rusia en Ucrania volvió a sembrar la incertidumbre y la industria volvió a mostrarse cauta.
Analistas del Bundesbank (banco central) advirtieron que la inversión tardará en repuntar debido al aumento de los conflictos internacionales, las sanciones económicas cruzadas y las tensiones en la coyuntura. (DPA)