El mandatario, quien participará este lunes y martes en la Cumbre de Seguridad Nuclear convocada por su homólogo estadunidense Barack Obama, visitó el domingo Nueva Orleans para conocer los esfuerzos de reconstrucción en esa localidad luego del paso del huracán Katrina en 2005.
En un discurso en el Instituto Brookings, Piñera informó que el costo de reconstrucción asciende a los 30 mil millones de dólares, que se financiarán en parte con fondos del estado, inversiones privadas, préstamos y donaciones.
La meta principal del gobierno es mantener un crecimiento del 6.0 por ciento anual y “derrotar la pobreza” mediante la creación de un total de un millón de empleos durante su administración, enfatizó.
“Necesitamos reconstruir lo que destrozó el terremoto”, sostuvo el mandatario, quien recordó que el sismo fue el segundo más fuerte en su país y el quinto más fuerte que se ha registrado en el mundo, que provocó el desplazamiento de la placa de Nazca por debajo de la Sudamericana.
El gobierno tiene un “programa extremadamente ambicioso” para mejorar la salud y la educación, a la vez que enfoca recursos de emergencia para labores de reconstrucción de casas, escuelas y hospitales que resultaron dañadas por el terremoto, puntualizó.
Según la prensa chilena, Piñera enviará este lunes al Congreso de su país un proyecto de ley para la creación de un fondo de reconstrucción y financiamiento para responder a las consecuencias del sismo de una magnitud de 8.8 grados que dejó 342 muertos y 800 mil damnificados.
Por otro lado, Piñera se mostró respetuoso de modelos económicos que impulsan algunos países de la región, pero expresó que él respalda un modelo de economía abierta con base al estado de derecho, la independencia de los poderes del estado y una prensa independiente.
Indicó, asimismo, que en su oportunidad condenó el golpe de Estado en Honduras, pero que al igual que la mayoría de países de la región espera que la nación centroamericana se reintegre al sistema interamericano.