Con un uniforme así "es imposible concentrarse en el trabajo", criticaba la asociación de azafatas, advirtiendo de que la medida podría suponer problemas de seguridad y desembocar en casos de acoso sexual.
La aerolínea pretende poner en marcha esta iniciativa con fines publicitarios, coincidiendo con la introducción del Airbus A330. Según argumenta, su objetivo es crear un ambiente que muestre lo alegres que son sus jóvenes azafatas.