"Nos vamos con la cabeza en alto, mirando a los chilenos a los ojos, porque cumplimos", dijo Piñera en su última actividad en La Moneda, previo a acudir al cambio de mando en el Congreso.
Piñera, quien por largos períodos de su mandato tuvo bajos apoyos populares, pidió en su último día como gobernante perdón por "haber presionado más de la cuenta" a los funcionarios de gobierno.
No obstante destacó el afecto de los ciudadanos. "Siempre sentimos el cariño, el apoyo y la comprensión de la gente", sostuvo el líder de la derecha chilena, que está pensando si intenta volver al poder en 2018.
"¿Qué cosa puede ser más motivante que el cargo que nos dieron los chilenos?", reflexionó.
Aunque logró alzas en crecimiento y empleo, Piñera enfrentó en su gobierno miles de protestas, debido a las desigualdades que atraviesan la sociedad chilena.
El nuevo gobierno será liderado por la presidenta Michelle Bachelet, socialista y opositora a Piñera.