La iniciativa de construir nuevos asentamientos en la zona E-1 en Cisjordania y Jerusalén Oriental pone en duda la voluntad política de Israel de querer avanzar hacia una solución integral fundada en la existencia de dos Estados, económicamente viables y con fronteras reconocidas internacionalmente.
El gobierno de México hace un llamado al gobierno de Israel a revertir esta decisión y a actuar de conformidad con las resoluciones pertinentes de las Naciones Unidas.