En declaraciones a la agencia oficial iraní, IRNA, Vahidi dijo que "el nivel de los sistemas de defensa iraníes de fabricación nacional alcanza los niveles más avanzados".
Desde la guerra contra Irak (1980-1988), y debido a las sanciones militares y económicas a que está sometido por la ONU, además de EEUU y la Unión Europea, Irán ha desarrollado su propia industria militar y armamentística, en ocasiones con ayuda de otros países, entre ellos Rusia y China, según fuentes diplomáticas en Teherán.
Las declaraciones de Vahidi se producen en un momento de gran tensión entre Teherán por un lado y por el otro Estados Unidos e Israel, donde algunas personalidades han amenazado con atacar instalaciones nucleares iraníes, debido a su supuesta intención de fabricar bombas atómicas.
La tensión aumentó a partir del martes pasado, cuando el Organismo Internacional de la Energía Atómica (OIEA) hizo público un informe en el que apunta que Irán ha trabajado en la tecnología necesaria para fabricar armas nucleares, aunque reconoce que no hay pruebas de que haya decidido hacer bombas atómicas.
El propio presidente de Irán, Mahmud Ahmadineyad, ha negado que tenga intención de fabricar armas atómicas y afirmado que el informe está basado en datos falsos de EEUU, al tiempo que recalcaba que no retrocederán "ni un ápice" en su programa nuclear, que asegura que tiene fines civiles.
Irán ha insistido en que, de sentirse amenazado, cerrará el estrecho de Ormuz, boca del golfo Pérsico por donde pasa el 40 por ciento del petróleo que consume el mundo, lo que podría ocasionar un cataclismo internacional de consecuencias impredecibles.
En los últimos meses, los militares iraníes han realizado numerosas declaraciones sobre el desarrollo de material defensivo y equipamiento militar, desde barcos, aeronaves y vehículos de uso castrense, hasta misiles y radares de alta tecnología de fabricación nacional.
Los militares iraníes han asegurado que disponen de medio centenar de tipos de misiles de fabricación propia, algunos con un alcance de hasta 2.000 kilómetros, y han destacado que tienen a su alcance Israel y las bases y buques de EEUU en la zona del golfo Pérsico.
Instituciones internacionales de estudios militares han destacado que los cohetes utilizados en el programa espacial iraní también pueden tener un uso militar, como misiles balísticos de largo alcance, si se les dota de cabezas armadas, convencionales e incluso nucleares.
Este mismo año, la Armada iraní puso en servicio la fragata "Jamaran", un nuevo buque lanzamisiles de fabricación nacional del que se construyen nuevas unidades y que es el más moderno de la flota del país.
El país dispone, además, de cientos de lanchas de ataque ligeras, a cargo de las Fuerzas Armadas, el Cuerpo de Guardianes de la Revolución, los Voluntarios Islámicos (Basij) y la Policía, que podría lanzar en masa contra buques enemigos en caso de una eventual agresión naval, según fuentes diplomáticas.