EU y Corea del Sur advierten a Pyongyang contra ensayo nuclear

El presidente estadounidense, Barack Obama, advirtió hoy a Corea del Norte contra nuevas provocaciones ante las sospechas de que Pyongyang prepara un ensayo nuclear, durante su visita a Seúl, la segunda parada de su gira asiática.

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Imagen de archivo del presidente norteamericano, Barack Obama.

"Las amenazas sólo llevarán a Corea del Norte a un mayor aislamiento", dijo durante una rueda de prensa conjunta con la presidenta surcoreana, Park Geun-hye.

Quizá es el momento de considerar sanciones más duras contra el país, añadió, al tiempo que cuestionó el efecto de las mismas sobre el empobrecido país.

Ante el trasfondo de un aumento de las tensiones, Obama y Park se mostraron de acuerdo en que habría que reconsiderar los planes de que las fuerzas de combate estadounidenses transfieran a Corea del Sur en 2015 el comando de tropas en caso de guerra, como estaba previsto. Estados Unidos tiene actualmente 28.500 efectivos estacionados en ese país.

La breve visita de Obama a la península coreana, que continuará hasta mañana sábado, se produce en un momento en que Seúl advirtió de un posible cuarto ensayo nuclear por parte de Pyongyang. Corea del Norte amenazó a finales de marzo, después de que el Consejo de Seguridad de la ONU condenara los test de dos misiles de medio alcance, con una "nueva forma de ensayo nuclear". Pyongyang acusa a Estados Unidos desde hace tiempo de llevar a cabo una "política de hostilidad".

Al igual que hiciera el jueves con Japón, la primera estación de su gira asiática, Obama garantizó hoy a Corea del Sur su fidelidad como aliado. "Estados Unidos y Corea del Sur trabajan codo con codo, tanto en lo que respecta a las provocaciones de Pyongyang como en nuestra negativa a aceptar armas nucleares en Corea del Norte"; señaló.

Los programas nuclear y misilístico suponen una amenaza directa también para Estados Unidos, dijo, pues Washington teme que el país pueda montar una cabeza nuclear en un misil intercontinental capaz de alcanzar territorio estadounidense.

Obama acusó al régimen de Pyongyang de llevar a cabo una política exterior desconsiderada y se mostró preocupado también por el sufrimiento de los ciudadanos de ese país. Obama reiteró sin embargo que está abierta la puerta del diálogo con el líder norcoreano Kim Johng-un, aunque con la condicón de que se hable de la desnuclearización del país.

Park advirtió que un test nuclear no sólo acarrearía sanciones de la ONU más estrictas contra Corea del Norte, sino que también cambiaría el panorama de la seguridad en el noreste de Asia, pues entre otras cosas quedarían sin efecto las conversaciones a seis bandas en las que participan las dos Coreas, Estados Unidos, Rusia, China y Japón, ya estancadas desde hace años.

El Ejército surcoreano expulsó hoy de sus aguas, según sus propios datos, a dos patrulleras norcoreanas con disparos de advertencia, un incidente ocurrido en la controvertida frontera del Mar Amarillo.

La visita de Obama se vio también ensombrecida por la tragedia del hundimiento del ferry "Sewol" hace más de una semana ante la costa oeste del país. Obama expresó a Park sus condolencias en nombre de todos los estadounidenses por la tragedia que deja ya 180 muertos y 120 desaparecidos.

Obama entregó a la presidenta surcoreana un ramo de magnolias y las banderas nacionales estadounidenses que se izaron en la Casa Blanca en el momento del accidente, como signo de condolencia.

Tras sus visitas a Japón y Corea del Sur, Obama visitará Malasia y Filipinas.