En una breve nota, Sana recordó que el régimen puso en libertad el pasado 5 de enero a 552 detenidos que tampoco estaban implicados en actos violentos.
El anuncio del indulto llega cuando una avanzadilla de observadores de la ONU se encuentra en Siria para verificar el frágil alto el fuego, pese a lo cual la violencia no ha cesado.
El régimen del presidente sirio, Bachar al Asad, libera de forma periódica a detenidos por participar en las protestas, si bien este es el mayor indulto masivo en meses.
Hace dos semanas otras 30 personas fueron puestas en libertad, lo que es una de las condiciones impuestas por el alto el fuego acordado por las partes bajo los auspicios del mediador de la ONU y la Liga Árabe, Kofi Annan, hace casi un mes.
Pese a ello, el ritmo de detenciones continúa sigue siendo muy superior a las excarcelaciones esporádicas que realizan las autoridades sirias.
Además, el régimen ha dado varios plazos a los opositores para que se entreguen y a cambio se beneficien de una amnistía, siempre y cuando no estén relacionados con delitos de sangre.
La violencia continuó hoy en Siria, con la explosión de un artefacto en la ciudad septentrional de Alepo, que causó varias víctimas según la oposición, y con una doble explosión en el centro de Damasco, que provocó daños materiales leves.