En rueda de prensa, tras reunirse con los trabajadores rescatados en el Hospital de Copiapó, distante 800 kilómetros al norte de Santiago, Piñera dijo que el costo del rescate “es una cifra que fluctúa entre los 10 y los 20 millones de dólares”.
“Pero les quiero decir algo mucho más importante, cada peso valió la pena, cada peso se gastó bien y con un propósito noble: rescatar con vida y sanos y salvos a nuestros mineros”, enfatizó el mandatario.
Añadió: “Hemos recibido la generosa donación de muchas empresas privadas y quiero agradecerla, muchas empresas privadas, particularmente del sector de la minería, han hecho aportes muy significativos”.
Precisó que el resto del costo del rescate lo ha financiado el gobierno “y ya veremos si pasarle la cuenta a la mina San Esteban, que es la que tiene la responsabilidad principal en este accidente que empezó como una tragedia, pero que terminó como una bendición”.
Respecto a las responsabilidades penales de los dueños del yacimiento, Piñera comentó que “aquí no va a haber impunidad, ya está trabajando la justicia en un juicio y el gobierno en materia de procedimientos administrativos”.
“Estamos usando todos los mecanismos para que las responsabilidades queden claramente establecidas y los responsables asuman las consecuencias”, recalcó el gobernante.
El miércoles finalizó el rescate de los 33 mineros que estuvieron 70 días atrapados a 620 metros de profundidad, operación que involucró a miles de personas en el yacimiento de oro y cobre distante 830 kilómetros al norte de Santiago.