Explicó que el DIF estatal, al igual que otras instituciones y organizaciones de la sociedad civil, estableció un centro de acopio de ayuda para los damnificados del estado de Guerrero.
Moreno Valle reconoció, en entrevista, que la alerta todavía no pasa. Estamos entre otros elementos, en riesgo por el reblandecimiento de la tierra, derivado de las lluvias, dijo.
Reconoció el respaldo del gobierno federal, a través de los secretarios de Gobernación y Energía, Miguel Ángel Osorio Chong y Pedro Joaquín Coldwell, respectivamente, que se refleja entre otros elementos en la asignación de maquinaría por parte de la Secretaría de Comunicaciones y Transportes para liberar los caminos que han registrado alguna obstrucción a causa de los deslaves.
Subrayó que 25 municipios registraron más daños, que se evalúan en coordinación con la Conagua para acceder a recursos del Fonden. Un primer cálculo de los recursos que se requieren, refirió, es de 387 millones de pesos para restablecer la infraestructura dañada, que se concentra en la Sierra Norte, la Sierra Nororiental y la Sierra Negra, aunque también hubo alguna afectación en la Sierra Oriente.
El Ejecutivo poblano, indicó que la prioridad para su administración es la apertura de los caminos y carreteras. En este momento no hay ninguna vialidad en la que no se pueda circular. No hay comunidades incomunicadas en la entidad, precisó.
En materia de protección civil, señaló que se instalaron albergues de manera temporal en los municipios de Tetela de Ocampo, Jalpan, Xicotepec de Juárez y Teziutlan, afortunadamente, las personas que estuvieron ahí ya regresaron a sus viviendas, dijo.