El aspirante priísta llamó a los electores a que le brinden su apoyo en los comicios del próximo domingo, con el fin de trabajar junto con los alcaldes en el desarrollo de acciones de progreso para fortalecer a esta zona sur del estado.
El anunciado espectacular cierre de campaña de los candidatos del Partido Revolucionario Institucional (PRI) en el sur de Tamaulipas deslució a consecuencia de las divisiones regionales de ese partido.
A última hora, Altamira decidió hacer su cierre solo y en el Estadio Tamaulipas que esperaba un aforo de 35 mil espectadores lució a menos de la mitad de su capacidad.
Tres horas de espera en el sol y el retraso de casi una hora de los candidatos, hizo que en el momento de los discursos, de la fiesta y los juegos pirotécnicos más de la mitad de los militantes priistas ya se hubieran salido del estadio.
Además de Torre, Jaime Turrubiates, postulado a la alcaldía de Ciudad Madero, y Miguel Manzur Nader, de Tampico, se unieron con los candidatos a diputados locales por los distritos 22, Rosa Muela, y del 20, Esdras Romero, quienes manifestaron su confianza de triunfo.
Por más esfuerzos que hacían los animadores y maestros de ceremonias para animar a los asistentes, éstos no se sumaban a las porras, pero el volumen de la música de campaña cada vez era más alto e invitaban a cantar “Vota por Rodolfo P’a que sea gobernador”.
Los militantes y simpatizantes del PRI llevaban en sus manos banderines y camisetas. “Sobró campaña”, decía un asistente, cuando veía que cada persona llevaba de tres a cuatro productos promocionales en sus manos.
Poco después de las 20:10 horas, los candidatos comenzaron sus discursos que tuvieron que acelerar para evitar que el candidato a gobernador hablara ante un estadio vacío, ya que la gente se salía a pesar de los esfuerzos de los organizadores.
Antes de que transcurrieran 20 minutos del acto de cierre de campaña, ya era el turno de la palabra para el último de los oradores: Rodolfo Torre.
Las puertas del estadio se cerraron para evitar que saliera la gente, pues en el momento en que concluyeron los discursos e iniciaron los juegos pirotécnicos, la mitad de los asistentes habían abandonado la que fue sede del equipo de futbol de la Jaiba Brava de Tampico-Madero.
Hoy el estadio no tiene equipo, sus palcos están descuidados, la cancha fue invadida por los templetes, sillería y una avalancha de militantes del PRI que acudieron para apoyar no a un equipo, sino a un partido político, que asegura ganará “carro completo”.
El próximo domingo en los comicios están en juego la gubernatura, 43 alcaldías y 22 diputaciones locales.