Según un boletín de este ministerio, la titular de Economía, Graciela Márquez, habló este mismo martes con el comisario de Comercio de la Comisión Europea, Phil Hogan.
En la charla telefónica, el comisario le comunicó que "las negociaciones para la modernización del pilar comercial del Acuerdo de Asociación Económica, Concertación Política y Cooperación entre México y la Unión Europea (UE) conocido comúnmente como TLCUEM, han concluido".
Hogan sostuvo que la propuesta mexicana para el capítulo de compras de Gobierno a nivel subfederal ha sido aceptada por los Estados Miembros de la UE.
Con este pendiente resuelto, se da por concluido el proceso de negociación del acuerdo que inició en junio de 2016, apuntó el texto.
"El acuerdo modernizado es de última generación e incluye nuevas disciplinas como energía y materias primas, desarrollo sostenible, pequeñas y medianas empresas, buenas prácticas regulatorias, transparencia y anticorrupción, entre otras", aseveró el informe.
EFECTO COVID-19
En la llamada, Márquez y Hogan compartieron su preocupación por los efectos de la pandemia del COVID-19 sobre la salud y la economía de la UE, una de las regiones más afectadas del mundo, y México, que suma 15.529 casos y 1.434 fallecidos al cumplir una semana en la máxima fase de contagio.
"Por ello, llegar a un acuerdo en los tiempos actuales muestra que ambas partes comparten los valores de un sistema de comercio basado en reglas que ofrezca certidumbre y en contra de cualquier corriente proteccionista", indicó la SE.
Ante este panorama, la principal cúpula del sector privado mexicano aplaudió la conclusión de las negociaciones.
"Estamos seguros que la modernización de este acuerdo significará un gran impulso a la economía y brindará certidumbre en estos tiempos tan difíciles", manifestó el Consejo Coordinador Empresarial (CCE).
PROMETEN COMERCIO ABIERTO
Finalmente, los funcionarios reiteraron su compromiso con el libre comercio y mutuo apoyo a la reforma de la Organización Mundial del Comercio (OMC).
Aseguraron que la recuperación económica debe respaldarse con un sistema multilateral de comercio transparente, no discriminatorio y basado en reglas.
Coincidieron en que mantener un flujo abierto de comercio e inversión será fundamental para proteger los empleos, prevenir el colapso de las cadenas de suministro y garantizar que los consumidores tengan acceso a bienes en las mejores condiciones en los mercados.
Terminada la negociación, será necesario concluir con algunos procedimientos para que el TLCUEM entre en vigor.
Entre ellos, están la revisión legal del acuerdo, que ya tiene avances significativos, y enseguida la traducción a todos los idiomas de la UE.
"Posteriormente la propuesta de la Comisión se transmitirá para su firma. Una vez firmado el acuerdo por ambas partes se someterá a consideración de los cuerpos legislativos", puntualizó el ministerio mexicano de Economía.
La UE es el tercer socio comercial de México y la segunda fuente de inversión extranjera directa.
En 2019, el comercio México-UE sumó 75,500 millones de dólares, con un valor de las exportaciones mexicanas de casi 25,000 millones de dólares.
Por su parte, las inversiones de los 27 países de la UE en México alcanzaron cerca de 180,000 millones de dólares.