Durante su participación en la reunión plenaria de senadores del Partido Revolucionario Institucional (PRI), afirmó que la ruta trazada para que México tenga finanzas públicas sanas “va caminando a buen paso”.
Resaltó que en los últimos años la economía mexicana ha mostrado fortaleza, pues a pesar de circunstancias complicadas y adversas ha mantenido un dinamismo y su crecimiento ha sido constante, permanente, robusto y resistente.
Señaló que sin considerar el sector energético, el crecimiento de México ha estado alrededor de 3.0 por ciento de 2014 a la fecha, y si se considera a este sector, el avance ha sido de 2.5 por ciento.
Ante los legisladores, el funcionario federal destacó que hacia adelante México tiene cuatro espacios de oportunidad.
Sobre el primero, comentó que si bien en los trimestres recientes el país ha “pagado” la gran incertidumbre que tiene respecto a la relación con Estados Unidos, pero si esta se resuelve y se ancla bien y se convierte en certidumbre, “puede darle espacio de aliento a la economía”.
Además, la economía mexicana tendría un estímulo de crecimiento adicional, en la medida en que Estados Unidos encuentre en su producción industrial mayores espacios de crecimiento, consideró Meade Kuribreña.
El tercer espacio de oportunidad, dijo, está en materia energética, pues pudiera darle al país algún impulso al crecimiento, tanto en precio como en inversiones que la reforma estructural en la materia está anclando.
Y en cuarto lugar están las reformas estructurales y el reciente Acuerdo para el Fortalecimiento Económico y Protección de la Economía Familiar, que ayudarán a enfrentar y acompañar de mejor manera la circunstancia difícil que atraviesa el país.
“Son tiempos difíciles, pero México tiene en su haber fortaleza, tiene en su haber compromiso de la clase política, empezando por la de este grupo parlamentario que nunca se ha quedado corto en tomar, en acompañar las decisiones, que el país requiere para salir adelante”, subrayó.
El secretario de Hacienda apuntó que estos tiempos complicados para México y el mundo, y la falta de certidumbre en el exterior, obligan a México a controlar las variables internas de buena manera.
Consideró que las cifras de crecimiento económico del cuarto trimestre de 2016 “son buenas”, las cuales reportaron un crecimiento de 2.2 por ciento a tasa anual y de 0.6 por ciento en su comparación trimestral, con cifras desestacionalizadas, según datos oportunos dados a conocer este martes por el INEGI.
Dichas cifras, agregó, acreditan que el Producto Interno Bruto (PIB) anual creció 2.3 por ciento en promedio al cierre de 2016, dato por arriba de lo que esperaban los analistas, y justo en el centro del rango estimado por la SHCP, de entre 2.0 y 2.6 por ciento.
“El 2.3 por ciento en el contexto (actual) es una cifra alentadora de crecimiento para 2016”, añadió Meade Kuribreña ante senadores del PRI, encabezados por su coordinador Emilio Gamboa.
Además, comentó que al cierre de 2016 se logró un déficit público menor al anticipado, lo cual también es una buena noticia y manda señales que el proceso de consolidación de finanzas públicas va caminando bien.
Meade Kuribreña refirió que el déficit en su definición más amplia (los Requerimientos Financieros del Sector Público) fue equivalente 2.9 por ciento del PIB, por debajo del 3.5 por ciento aprobado inicialmente para 2016 y también inferior a la meta actualizada en agosto de 3.0 por ciento, luego de haber recibido el remanente de operación del Banco de México por 239.1 mil millones de pesos.
Aseveró que esto se refleja también en un mejor balance del sector público, a lo cual contribuyó el crecimiento robusto de los ingresos del sector público y el remanente de operación del Banxico, lo que permitió fortalecer los balances de Pemex y de la CFE, así como alimentar los fondos de estabilización de ingresos petroleros.
“Eso quiere decir que la ruta que nos hemos trazado de tener finanzas públicas sanas, vamos caminando en buen camino, a buen paso, en medio de un contexto muy complicado”, subrayó el secretario de Hacienda.