En una entrevista con la BBC divulgada hoy, Merkel dijo que Atenas tiene grandes problemas en el área administrativa o en la competencia en el ámbito empresarial, pero "intenta superarlos".
"Hemos tomado la decisión de estar en la unión monetaria. Esta no es una decisión monetaria, es política. Sería una catástrofe si tuviéramos que decirle a uno de ellos que ha decidido estar con nosotros: ya no te queremos", agregó la canciller.
En su opinión, una eventual salida de Grecia del euro "debilitaría" la zona del euro y la gente en todo el mundo empezaría a preguntarse cuál será el próximo país en marcharse.
"Sería un enorme error político permitir la salida de Grecia. Es por ello que seremos claros con Grecia, vamos a decirle: si quieres ser parte de una moneda común tienes que hacer el trabajo en casa, pero al mismo tiempo siempre tendrás nuestro apoyo", agregó.
La canciller puntualizó que mucho se ha aprendido del rescate griego y destacó los esfuerzos del gobierno británico por aplicar un programa de austeridad destinado a atajar el endeudamiento.
Grecia ha obtenido el visto bueno para recibir el segundo paquete de rescate estimado en 130,000 millones de euros.
"En los últimos dos años en Europa, particularmente en la zona del euro, hemos aprendido mucho. ¿Debemos reflejar una vez más por qué estamos juntos en Europa? ¿Por qué somos una comunidad que despliega solidaridad y se hace responsable de otros?", se preguntó.
Merkel señaló que Europa, en particular la zona del euro, "se ha deslizado hacia la crisis" como consecuencia de una "desaceleración financiera global" y "hay una situación muy tensa".
"Nosotros en la zona del euro estamos convencidos de que juntos somos más fuertes", insistió la canciller.
Sobre el Reino Unido, Merkel dijo que fue "correcta" la decisión del primer ministro británico, David Cameron, de reducir el gasto.
En octubre de 2010, pocos meses después de llegar al poder, Cameron aplicó un fuerte programa de austeridad destinado a reducir el abultado déficit del Reino Unido.