El año pasado, Harley-Davidson ingresó 4.888 millones de dólares, una cifra un 9 % superior a la de 2021, y entregó 193.500 motocicletas, un 3 % más que en el anterior periodo.
En el último trimestre de 2022, los beneficios netos de la empresa ascendieron a 42 millones de dólares, lo que supone un aumento del 94 %, los ingresos se situaron en 1.142 millones de dólares (12 % más que en los últimos 3 meses de 2021) y las unidades vendidas entregadas sumaron 34.000 motocicletas (un crecimiento del 18 %).
Los resultados de los últimos tres meses de 2022 fueron superiores a lo esperado por los analistas.
Por regiones, Norteamérica sigue siendo el principal mercado para la compañía, seguido de Europa, Oriente Medio y África, Asía-Pacífico y Latinoamérica.
La compañía con sede en Milwaukee también registró un fuerte aumento de las ventas de motocicletas eléctricas.
El año pasado, Harley-Davidson vendió 597, lo que supone un 30 % de aumento. Los ingresos por las ventas de motocicletas eléctricas pasaron de 36 a 47 millones de dólares, un crecimiento del 31 %.
Harley-Davidson Financial Services (HDFS), el brazo financiero de la compañía, aumentó sus ingresos un 3 % a 821 millones de dólares. Pero los ingresos de explotación cayeron un 23 % a 318 millones de dólares.
Para 2023, la compañía prevé que los ingresos de su negocio central, Harley-Davidson Motor Company (HDMC), que produce las motocicletas con motores de combustión, aumenten entre un 4 % y un 7 % mientras que el margen de los ingresos de explotación se situará entre el 14,1 y el 14,6 %.
Con respecto a LiveWire, la unidad que produce motos eléctricas, la compañía prevé vender entre 750 y 2.000 unidades y una pérdida de explotación de entre 115 y 125 millones de dólares.