Según ha indicado hoy el grupo, la vuelta a beneficios refleja las diversificación de la cartera de negocios del grupo, tanto geográfica como sectorial, a pesar de un entorno macroeconómico difícil, especialmente en los contratos de la minería y debido a las condiciones climáticas adversas en los estados de Queensland y Australia Occidental.
Durante el periodo, Leighton anunció un acuerdo para vender el 70 por ciento de su área de telecomunicaciones al fondo canadiense de pensiones de profesores, Ontario Teachers, por un valor total de 718 millones de euros (885 millones de dólares australianos).
Los ingresos de la compañía durante el primer trimestre aumentaron un 5.8 por ciento hasta los 4.100 millones (5,400 millones de dólares).
Por su parte, la cartera de obra alcanzó los 32,200 millones de euros (42,200 millones de dólares).
La compañía espera cerrar el ejercicio con un beneficio después de impuestos de entre los 400 y los 460 millones de euros (de 520 a 600 millones de dólares) y un nivel de endeudamiento objetivo del 25 al 35 por ciento para fin de año.
Para este año, Leighton busca aprovechar el crecimiento a largo plazo a nivel nacional e internacional a fin de ofrecer retornos sostenibles a los accionistas.
