La industria automotriz de Brasil retrocedió así 16 años en términos de producción, según explicó hoy en una rueda de prensa virtual el presidente de la Asociación Nacional de Vehículos Automotores (Anfavea), Luis Carlos de Moraes.
Pese a la caída anual, la fabricación de automóviles, utilitarios, camiones y autobuses en diciembre creció un 22.8 % en relación al mismo mes de 2019, con un total de 209,296 unidades, un número que la patronal consideró positivo dado los desafíos logísticos, las limitaciones de insumos y los protocolos sanitarios impuestos durante la pandemia.
Anfavea destacó asimismo que la inyección de recursos de emergencia en la economía y el buen desempeño del agronegocio ayudaron a amenizar las pérdidas en el segundo semestre del año, cuando comenzó la reapertura gradual en Brasil tras la paralización de casi todas las actividades entre los meses de marzo y mayo.
"La industria hizo un gran esfuerzo para atender la demanda, trabajando los fines de semana y suspendiendo parte de las vacaciones colectivas, pero entra en 2021 con los estoques más bajos de su historia, suficientes apenas para 12 días de ventas", resaltó Moraes.
Según la patronal, el sector registró el año pasado el peor dato de exportaciones desde 2002, con un total de 324,330 unidades enviadas al exterior, lo que supone un 24.3 % menos que en 2019.
Las exportaciones dejaron una facturación de 7,400 millones de dólares, menos de la mitad de lo exportado en 2017, cuando el país se recuperaba de la grave recesión vivida entre 2015 y 2016.
En cuanto al número de vehículos comercializados en Brasil, el informe señala que fueron vendidos en el mercado interno 2,058 millones de unidades, cifra que representa una disminución del 26.2 % respecto a 2019.
De esa forma, las ventas de vehículos retrocedieron al nivel de 2016, auge de la última crisis económica de Brasil.
Para 2021, el sector prevé un aumento del 15 % en las ventas, del 9 % en las exportaciones y del 25 % en la producción de vehículos, índices todavía insuficientes para recuperar los niveles previos a la pandemia.
"Nunca fue tan difícil proyectar los resultados de un año, pues tenemos una neblina en nuestra frente desde marzo, cuando comenzó la pandemia", resaltó el presidente de Anfavea.
Moraes citó la llegada de la segunda ola de la pandemia a Brasil, donde ya se registran más de 200,000 muertes y 8 millones de casos, así como la demora prevista en el proceso de inmunización, lo que "impedirá una retomada más rápida" de la economía.