En febrero pasado, el Ejecutivo comunitario avanzó que la zona euro se contraería este año el 0.3 por ciento, y que el PIB de 2014 sería del 1.4 por ciento.
La CE señaló que espera que tras la recesión que marcó 2012, la economía de la Unión Europea (UE) se estabilice en la primera mitad de este año, según aparece en las previsiones macroeconómicas para 2013 y 2014 distribuidas hoy.
Para el conjunto de la UE, los economistas de la CE prevén una contracción del PIB del 0.1 por ciento y una expansión del 1.4 por ciento para 2014.
El alto nivel de desempleo sigue siendo una de las principales preocupaciones, y según las nuevas proyecciones macroeconómicas, en los países del euro el paro subirá al 12.2 por ciento este año y bajará al 12.1 por ciento el siguiente, mientras que para los Veintisiete se quedará en el 11.1 por ciento los dos años.
"Hay que hacer todo lo posible para superar la crisis del desempleo en Europa", dijo el vicepresidente de la CE y responsable de Asuntos Económicos y Monetarios, Olli Rehn, en un comunicado.
Añadió que las políticas comunitarias se centran "en un crecimiento sostenible y en la creación de empleo. La consolidación fiscal continua, pero está bajando el ritmo".
Rehn recomendó a los Estados miembros que "intensifiquen las reformas estructurales para desbloquear el crecimiento en Europa".
En cuanto a la inflación, la CE prevé que la zona euro termine este año en el 1.6 por ciento y baje al 1.5 por ciento el próximo año, mientras que para la UE serán del 1.8 y del 1.7 por ciento, respectivamente.
La CE subraya en ese documento que "estos pronósticos se basan en la asunción de que continúan los esfuerzos políticos para prevenir otro agravamiento de la crisis de deuda soberana".
Respecto al preocupante desempleo, los economistas de la Comisión señalan el alto grado de divergencia de ese indicador entre los diferentes Estados miembros y apuntan a que los datos "sugieren en el corto plazo un posterior deterioro de la situación del mercado laboral".
"La reacción del empleo al descenso del PIB se ha observado más cercana ahora que entre 2008-10", señala el documento, que también afirma que "las crecientes cifras de parados de largo plazo y el aumento de las discordancias en el mercado laboral auguran malas perspectivas para el empleo a medio plazo".
Respecto a las economías de fuera de la UE, el Ejecutivo comunitario indica que la debilidad generada en 2012, parece haberse superado y que para 2013 el PIB mundial se situará en el 3.1 por ciento y en el 3.8 por ciento el próximo ejercicio.
Entre las economías más avanzadas, los expertos de la CE señalan que la de Estados Unidos crecerá el 1.9 por ciento en 2013 y el 2.6 por ciento en 2014, y Japón avanzará el 1.4 y el 1.6 por ciento respectivamente.
"Es probable que el ritmo de crecimiento del grupo de las economías emergentes siga siendo robusto, aunque con diferencias, pues en Asia se espera una expansión más firme y más moderada en América Latina y Rusia", apunta el documento.
La CE espera para China un crecimiento del PIB del 8 por ciento en 2013 y el 8.1 por ciento en 2014, para el conjunto de Latinoamérica prevé un aumento de la actividad económica del 3.1 y del 3.5 por ciento, y para Rusia del 3.3 por ciento y del 3.8 por ciento, respectivamente.
En cuanto a las importaciones, Bruselas prevé un crecimiento del 3.25 por ciento para este año en la UE, "lo que refleja un ritmo superior al de las exportaciones de los mercados de los Estados miembros".
El documento de la CE agrega que las exportaciones se han visto afectadas por la pasada fortaleza del euro, por lo que prevé que las ventas exteriores comunitarias aumenten este año únicamente el 2 por ciento.