Estas cifras reflejan un déficit en las transferencias corrientes de 7.600 millones de euros e ingresos de 1,200 millones de euros.
En este mismo período, la zona del euro tuvo un superávit en bienes de 400 millones de euros y en servicios de 3,400 millones.
La balanza por cuenta corriente mide los ingresos y pagos al exterior por intercambio de mercancías, servicios, rentas y transferencias.
El saldo acumulado anual de la balanza por cuenta corriente en los últimos doce meses, hasta agosto, tuvo un déficit de 54,900 millones de euros, lo que supone un 0.6 por ciento del Producto Interior Bruto (PIB) del conjunto de países que componen la zona del euro.
En comparación, el saldo acumulado anual de la balanza por cuenta corriente se situaba en agosto de 2010 en los 24,200 millones de euros.
Asimismo, en la cuenta financiera de los países que comparten el euro, las inversiones directas y de cartera, registraron ingresos netos en agosto de 36,000 millones de euros.
El balance acumulado de los últimos doce meses, hasta agosto, mostró entradas netas de 358,000 millones de euros en las inversiones directas y por cartera en comparación con los 50,000 millones del periodo anterior.
La balanza de pagos recoge las transacciones comerciales y financieras de un país o un grupo de países en relación con otros y está compuesta de la cuenta corriente y la cuenta de capital.