La balanza por cuenta corriente cerró noviembre con unos números rojos de 222,400 millones de yenes (unos 1,900 millones de euros), detalló el Ministerio de Finanzas en un informe preliminar.
Se trata de un déficit mucho mayor del previsto por los analistas, que auguraban un dato negativo de unos 33,500 millones de yenes (unos 286 millones de euros).
La balanza comercial sufrió en noviembre un déficit de 847,500 millones de yenes (7,150 millones de euros), resultado de una caída de las exportaciones del 4.2 por ciento respecto al mismo mes de 2011 y de un aumento de las importaciones del 0.8 por ciento interanual.
Japón, tercera economía mundial, había registrado su anterior déficit por cuenta corriente en enero, causado a su vez en buena parte por la fuerte apreciación de la moneda local, que debilita la competitividad de las exportaciones del país.
El de aquel mes fue el primer déficit en este apartado en los últimos tres años y el mayor hasta esa fecha.
La balanza por cuenta corriente, que refleja los pagos e ingresos por intercambios con el exterior de bienes, servicios, rentas y transferencias, está considerada uno de los indicadores comerciales más amplios de un país.
En 2012 el yen se mantuvo en niveles muy elevados frente al euro y el dólar, aunque desde diciembre su trayectoria ha ido a la baja tras la victoria del líder conservador Shinzo Abe en las elecciones generales celebradas el 16 de ese mes.
El nuevo primer ministro se ha comprometido a revitalizar la economía con políticas que impulsen el crecimiento del país y a luchar contra la fortaleza de la moneda local.