El interés registrado hoy es ligeramente inferior al de la semana pasada, cuando alcanzó el 7.65 por ciento.
La demanda de hoy superó 3 veces la oferta, por lo que la ÁKK aumentó la emisión en unos 17 millones de euros, llegando así hasta los 153 millones.
Las tres grandes agencias de calificación de riesgos mantienen la calidad de la deuda húngara en el nivel del "bono basura".