En un comunicado conjunto, los máximos responsables de ambas firmas explicaron que una vez terminada la operación -que se prevé para la segunda mitad de este año-, Frontier pasará a controlar el 51.5 % de la nueva empresa resultado de la fusión, cuyo nombre no ha sido revelado por el momento.
"Esta transacción busca crear un competidor agresivo de coste ultra bajo que ofrezca a nuestros clientes un servicio todavía mejor al actual, mejore las oportunidades laborales para los miembros de nuestros equipos y aumente la presión competitiva", indicó el presidente de Spirit, Ted Christie.
El valor de la operación entre las dos aerolíneas se sitúa en los 6,600 millones de dólares, y los inversores de Spirit recibirán 1.9 acciones de Frontier y 2.13 dólares adicionales por cada título de la compañía en su propiedad.
La adquisición ya ha sido aprobada por las juntas directivas de ambas firmas, por lo que ahora queda pendiente la ratificación por parte de los accionistas y el visto bueno de los reguladores de la competencia.
Tras anunciarse la operación, las acciones de Spirit se disparaban un 13.25 % en el mercado de valores de Nueva York, mientras que las de Frontier se dejaban un 1.29 %.