A las 09:05 hora local (14:05 GMT), los contratos futuros del WTI para entrega en abril restaban 0.26 dólares con respecto al cierre del día anterior.
El crudo de referencia estadounidense se tomaba un respiro tras dispararse un 2.4 % en la víspera debido a la ratificación presidencial del tercer rescate fiscal contra los efectos del coronavirus en Estados Unidos.
También influyó la promesa del presidente Joe Biden de que todos los adultos estadounidenses puedan estar vacunados el 1 de mayo, que alimentó las esperanzas de la recuperación y el repunte de la demanda.
"Las expectativas de demanda futura han subido con fuerza, en línea con lo que ahora se espera que sea una recuperación económica más rápida en EE.UU. El hecho de que la temporada de viajes en EE.UU. pueda restablecerse es un bonus", opinó Sophie Griffiths, de la firma Oanda.
Del lado de la oferta, la OPEP precisamente revisó ayer al alza sus previsiones de demanda para este año en 220,000 barriles diarios y estimó que la economía mundial crecerá un 5.1 % tras contraerse un 3.7 % el anterior debido a la covid-19.
Esta semana, el mercado apenas reaccionó a la notable subida semanal en las reservas de crudo de EE.UU., pero acogió positivamente a la caída en los inventarios de gasolina, todavía fruto de la tormenta invernal en el estado sureño de Texas.