Entre enero y junio, la facturación de HSBC se contrajo un 4.46 % hasta los 25,551 millones de dólares (21,522 millones de euros), algo que la entidad achaca a las reducciones de los tipos de interés en 2020 y al descenso de ingresos del área de mercados y valores.
Según la entidad, con fuerte presencia en el mercado asiático, todas las regiones en las que opera fueron rentables, por lo que restablecerá el pago de dividendos a sus accionistas.
En la cuenta de resultados que el grupo remitió hoy a la Bolsa de Valores de Hong Kong, donde cotiza, su consejero delegado, Noel Quinn, afirma que esto refleja que se ha "regresado al crecimiento" en los mercados principales del banco.
De hecho, según la medición que aporta HSBC para el desglose geográfico -beneficios brutos-, consiguió un resultado positivo en todos ellos, especialmente en su principal mercado, Asia, donde elevó sus ganancias antes de impuestos en un 64 % hasta los 6,936 millones de dólares (5,842 millones de euros).
En la Bolsa de Valores de Londres, las acciones del HSBC subían el 1.08 % hasta situarse en 401 peniques (465 céntimos).
En Europa logró salir de pérdidas y se anotó un beneficio bruto de 1,968 millones de dólares (1,658 millones de euros).
En Norteamérica sus ganancias antes de impuestos subieron un 7.4 %; en la región formada por Oriente Medio y África septentrional, un 6.7 %, y en Latinoamérica, un 3.7 %.
Así, las ganancias brutas totales crecieron un 151 % interanual hasta los 10.839 millones de dólares (9,130 millones de euros).
Por su parte, la facturación general derivada de las operaciones de la entidad financiera, una de las mayores del mundo, fue de 26,516 millones de dólares (22,336 millones de euros) en el primer semestre, un 30.6 % superior a la de la primera mitad de 2020, cuando el grupo ya empezó a sufrir los efectos de la crisis causada por la pandemia de la covid.
En cuanto a la ratio de solvencia, la 'Tier 1' -recursos propios básicos- se situó en el 15.6 % a finales de junio, 0.3 puntos por debajo del dato con el que cerró 2020, debido en parte a un incremento de los activos por riesgos ponderados que se deriva del aumento en la concesión de créditos.
A este respecto, en la primera mitad de 2021 se concedieron 21,524 millones de dólares (18,131 millones de euros) en préstamos, lo que elevó el neto total a los 1.06 billones de dólares (892,332 millones de euros) al cierre del semestre.
El total de depósitos se situó en 1.67 billones de dólares (1.41 billones de euros) al final de junio, lo que supone una subida interanual del 8.9 %.
Visto el buen progreso de las cuentas del grupo, la junta directiva de HSBC ha aprobado un dividendo de 0.07 dólares (0.059 euros) por acción.
De cara a lo que queda de año, Quinn destaca la "inercia" positiva del crecimiento y de los planes de transformación del grupo, especialmente en sus negocios en Estados Unidos y Europa continental, aunque advierte de que todavía existen incertidumbres derivadas de la pandemia, que en los últimos meses han puesto la facturación bajo presión.
El HSBC indicó que el programa de reestructuración sigue en curso tras anunciar en febrero del año pasado que suprimiría 35,000 empleos como parte de un plan de reducción de costes para 2022, que la entidad estima en 4,500 millones de dólares (3,784 millones de euros).