Su facturación continuó creciendo en el mismo periodo hasta los 22,952 millones de dólares, un 5 % más que en el mismo tramo del año pasado, según un comunicado.
En cuanto al segundo trimestre del año, el periodo en el que más se fijaban este miércoles los inversores de Wall Street, la compañía con sede en Atlanta (Georgia) ingresó 11,972 millones de dólares, lo que supone una subida del 6 % en términos interanuales.
En este trimestre, los beneficios aumentaron hasta los 2,401 millones, un 3 % más comparados con los logrados entre abril y junio del año pasado.
Para 2023, Coca-Cola ahora espera un crecimiento comparable de las ganancias por acción ajustadas del 5 % - 6 %, por encima de su pronóstico anterior de un aumento del 4 % - 5 %.
La empresa también elevó su perspectiva de ingresos orgánicos y ahora prevé un aumento del 8 % - 9 %, por encima de su rango anterior del 7 % - 8 %.
"La fortaleza de nuestros resultados del primer semestre y la resiliencia de nuestro negocio nos dan la confianza para elevar nuestra guía para 2023", anunció en un comunicado el presidente y consejero delegado, James Quincey.
Las acciones de la empresa subían un 2 % en las operaciones previas a la comercialización, pero una vez que sonó la campana de Wall Street bajaron a -0.22 %.