Buffett, en un comunicado, señaló que desde hace años ha sido un "consejero inactivo" de la fundación de los Gates y que ahora dejará el cargo, como ha hecho con el resto de consejos de administración fuera de su propia empresa, Berkshire Hathaway.
El legendario inversor dejó claro, en todo caso, que sus objetivos coinciden plenamente con los de la Fundación y que simplemente considera que su participación no es necesaria.
Su salida, sin embargo, se produce en un momento complicado para la institución, tras el anuncio del divorcio de Bill y Melinda Gates, que la han liderado durante dos décadas.
La Fundación gestiona fondos de unos 50,000 millones y es una de las mayores organizaciones filantrópicas del mundo, con proyectos en multitud de ámbitos.
Buffett hizo el anuncio en el marco de su comunicación anual sobre las donaciones que hace a distintas organizaciones sin ánimo de lucro.
En 2006, el multimillonario se comprometió a dedicar a la filantropía todas sus acciones de Berkshire Hathaway, que representan más del 99 % de su fortuna, estimada por Forbes en más de 100,000 millones de dólares.
Con la donación de 4,100 millones de dólares en acciones dada a conocer hoy, el inversor asegura que se ha deshecho hasta ahora de la mitad de los títulos que tenía.
