La facturación acumulada de la entidad entre enero y septiembre ascendió un ligero 2 % interanual y se situó en 67,053 millones, según un comunicado.
En el tercer trimestre, el más reciente y seguido por Wall Street, BoA tuvo unas ganancias de 7,691 millones, lo que supone un 58 % más en comparación con el mismo tramo de 2020, con unas ventas de 22,766 millones, lo que supone un 12 % más.
"Hemos reportado sólidos resultados a medida que la economía sigue mejorando y nuestros negocios recuperan el impulso de crecimiento orgánico de los clientes que vimos antes de la pandemia", dijo el máximo ejecutivo del banco, Brian Moynihan.
Como otras grandes financieras, BoA continuó reduciendo las reservas de las que hizo acopio a lo largo del año pasado para hacer frente a la crisis generada por la covid-19 y en este trimestre liberó 1,100 millones.
"La calidad de los activos permaneció fuerte, con una tasa de pérdidas cercana a mínimos de los últimos 50 años, lo que ha permitido, de nuevo en este trimestre, la reducción de reservas contra las pérdidas por préstamos", apuntó el jefe financiero, Paul Donofrio.
Por otra parte, el margen de intereses del banco se disparó un 10 %, hasta los 11,100 millones, gracias a un mayor nivel de depósitos e inversiones relacionadas con la liquidez, entre otras cosas.
Por áreas de negocio, este trimestre destacó la buena marcha de la banca de consumo con ganancias de 3,000 millones de dólares y un balance de depósitos que superó por primera vez el billón de dólares (16 % superior).
La firma también señaló que el área de gestión de riqueza global e inversiones logró un beneficio trimestral récord de 1,200 millones, mientras que el de la banca global se situó en 2,500 millones y el de mercados globales recaudó 926 millones.