Saquon Barkley, el todoterreno de la NFL que invierte en bitcoin

Más de 33 kilómetros por hora de pico de velocidad. Más de 300 kilos de 'squat'. Líder en yardas por tierra en temporada regular y playoffs de la NFL. Anunció en 2021 que invertiría la totalidad de sus ganancias por patrocinio en bitcoin. Así es Saquon Barkley, el prototipo del 'running back' perfecto que retará a Patrick Mahomes en el Super Bowl.

457b6a198571a9a90943e5405c45d8f22a98d5c4miniw.jpg

Saquon Barkley, de los Philadelphia Eagles. EFE/EPA/CAROLINE BREHMAN

Firmó en marzo de 2024 un contrato de 37.75 millones de dólares en tres años con los Philadelphia Eagles. Por su rendimiento, es un negocio redondo para su equipo. Un todoterreno que arrasa por tierra bajo todas las condiciones climáticas, que va camino de convertirse en el mejor fichaje de siempre en la agencia libre de la NFL.

Next Gen Stats, la plataforma de análisis de datos de la NFL, captó la velocidad máxima de Barkley en su carrera de 62 yardas para un 'touchdown' contra Los Ángeles Rams, en la ronda divisional de los playoffs. 33.4 kilómetros por hora bajo la nieve. Acabó con 205 yardas por tierra y dos anotaciones.

Este domingo, en la final de la Conferencia Nacional contra los Washington Commanders, se sobrepuso a unas molestias de pantorrilla para saltar al campo. ¿Velocidad máxima? Cerca de 32 kilómetros por hora. Anotó tres 'touchdowns' y sumó 188 yardas para sellar el billete para el Súper Bowl contra los Kansas City Chiefs.

Las sentadillas son una parte clave de su entrenamiento. La NFL publicó un vídeo en el que Barkley aguantaba con facilidad un peso de 265 kilos en su espalda. El 'running back' de los Eagles aseguró que puede llegar a levantar entre 295 y 317 kilos.

Forma una dupla estelar con el 'quarterback' Jalen Hurts y va a por el primer trofeo Vince Lombardi de su carrera en el Súper Bowl de Nueva Orleans, que se disputa en el día de su 28 cumpleaños.
Su adiós a los Giants, en una serie de HBO

Seleccionado con el número dos absoluto por los New York Giants en el draft de 2018, el ex de Penn State no renovó su contrato con los neoyorquinos tras la temporada 2023-24.

La conversación con el director general de los Giants que formalizó su salida de la franquicia fue grabada, sin que el 'running back' lo supiera, por las cámaras de la serie Hard Knocks, de HBO.

El propio Barkley reconoció que se enteró de la grabación al ver los comerciales sobre el lanzamiento de la serie, que tuvo enorme impacto en Estados Unidos.
Más de un millón de dólares en variables

Lejos de competir por el título en Nueva York, Barkley firmó un contrato por un total de 37,75 millones de dólares, 26 de ellos garantizados, con los Eagles.

El 'running back' incluyó en su contrato una larga serie de variables que dependían de su rendimiento en el campo y, a falta de diez días para el Super Bowl, ya consiguió más de un millón de dólares extra.

Contaba con un 'bonus' de 250,000 dólares por alcanzar las 1,500 yardas recorridas en la temporada regular, y otro de la misma cantidad por superar las 2,000 yardas. Además, según estima el portal 'Front Office Sports', recibirá 250,000 dólares por clasificarse al Super Bowl y medio millón de dólares por haber sido elegido en el primer equipo 'All-Pro' de la temporada.
Su inversión en Bitcoin

Al margen de sus ganancias por el fútbol americano, Barkley cuenta con un amplio porfolio de contratos de patrocinio que incluyen Nike, Bose, Pepsi, Visa, Toyota y Dunkin Donuts, según Forbes.

Pero Barkley sorprendió en 2021 cuando anunció su intención de invertir la totalidad de sus ganancias por contratos de patrocinio en bitcoin.

"Si quieres crear un bienestar económico generacional, no puedes hacerlo con el deporte que practico ni jugando en la posición en la que juego", consideró entonces en declaraciones publicadas por NBC, al explicar su inversión en las criptomonedas.

No es el único deportista de élite de la NFL en haber reconocido su apuesta por el bitcoin. Aaron Rodgers, Trevor Lawrence o Odell Beckham Jr también invirtieron en las criptomonedas, según un análisis de Forbes, aunque varios de ellos lo han hecho con altibajos.