En la reedición de la final de Wimbledon, que también acabó con triunfo de las norteamericanas, las Williams impusieron su fortaleza a pesar de la resistencia de las checas, que procuraron cargar el juego sobre Venus, en peor momento que su hermana Serena, campeona olímpica también del cuadro individual.
Venus y Serena cerraron el partido disputado bajo techo a causa de la lluvia, en la pista central del All England Club, en una hora y 33 minutos.
Se trata de la cuarta medalla de oro que acumulan tanto Venus como Serena a lo largo de sus respectivas carreras. Campeonas en dobles en Sydney 2000, Pekín 2008 y Londres 2012, suman una más de la competición individual. Venus fue campeona olímpica en Sydney 2000 y Serena en la presente edición, en Londres.