Procedente de Atenas, la llama fue escoltada desde Atenas por la princesa Ana de Inglaterra, el presidente del Comité Organizador de Londres 2012 (LOCOG), Sebastian Coe, el futbolista David Beckham y el alcalde londinense, Boris Johnson.
Tras su llegada a Cornualles, la antorcha olímpica comenzará mañana un recorrido de 13.000 kilómetros en manos de 8.000 relevistas que concluirá en el Estadio Olímpico de Londres el 27 de julio, coincidiendo con la inauguración de los Juegos.
La "Luciérnaga" llegó con puntualidad británica a la hora prevista, las 18.25 GMT, y de ella descendió la princesa Ana con la llama olímpica, protegida por una lámpara especial.
Una vez en la pista de aterrizaje, donde aguardaban el viceprimer ministro, Nick Clegg, y más de 500 británicos que acudieron a presenciar el acto, el popular futbolista fue el encargado de prender la antorcha olímpica que durante los próximos 70 días recorrerá todo el Reino Unido hasta llegar a Londres.
"Cuando ves cómo la gente contempla la antorcha olímpica es cuando te das cuenta de lo que implican unos Juegos.
Cuando tomas posesión de la antorcha dices: 'Esto son los Juegos", declaró la princesa Ana a la BBC nada más bajar del avión.
"La llegada del fuego es un momento mágico para cualquier país. Esta llama conectará a millones de personas del Reino Unido con los Juegos de una manera única", aseguró el exmedallista olímpica, Sebastian Coe.
La delegación de Londres 2012 recibió ayer la entrega del fuego sagrado de Olimpia en el Estadio Panathinaico, lugar que albergó los primeros Juegos Olímpicos de la era moderna en 1896, y hoy, entre una fuerte lluvia en Atenas, partió hasta el Reino Unido.
La llama viajó en un recipiente diseñado especialmente para mantener la llama encendida hasta que la "Luciérnaga" de BA, un avión dorado con el emblema de Londres 2012, aterrizó en la base militar, situada en el punto más occidental de Gran Bretaña conocido como Land's End (el fin del mundo).
Mañana, la antorcha olímpica, obra de los diseñadores Edward Barber y Jay Osgerby, emprenderá su ruta hacia el Estadio Olímpico de Londres durante la que recorrerá 13.000 kilómetros, visitará 1.019 localidades británicas y será transportada por alrededor de 8.000 relevistas distintos.
El primero de ellos será el regatista británico Ben Ainslie, el encargado de empezar a las 6.12 GMT de mañana el camino que llevará la antorcha olímpica por todo el Reino Unido y en un momento dado a la capital irlandesa, Dublín.