"Había algunos equipos que tenía en mi lista a los que llamé y no me devolvieron la llamada. No puedo esperar para jugar con ellos y hacer todo lo posible para aplastarlos", dijo el jugador que se convirtió en agente libre tras abandonar a los Arizona Cardinals en mayo pasado.
Hopkins fue el líder de los Cardinals en la temporada 2022 con 717 yardas en 34 recepciones.
Ante su salida de Arizona pensó que no tendría problemas para encontrar acomodo en otro equipo, pero los únicos que se interesaron en sus servicios fueron los New England Patriots y los Titans, en los que jugará la temporada 2023.
"Los Detroit Lions no me querían, los Dallas Cowboys no me querían, los Giants no me querían. Demonios, ¿quién más no me quiso? San Francisco no me quiso", confesó el veterano de 31 años.
A pesar de sus ganas de revancha ante estos contendientes, todos de la Conferencia Nacional (NFC), los Titans no los tienen entre sus rivales en su calendario de esta campaña.
La única manera en que Hopkins y Tennessee podrían encontrarlos sería en el Super Bowl LVIII, aunque para eso falta una larga temporada.
A pesar de ello el nacido en Clemson, South Carolina, dijo estar contento con la oportunidad que se le presentó en el equipo del entrenador Mike Vrabel.
"Estoy muy agradecido por el lugar en donde estoy, creo que tomé la mejor decisión, sé que una vez que entre al campo mi juego hablará por sí mismo", subrayó.
DeAndre Hopkins arribó a la NFL seleccionado en la primera ronda del Draft del 2013 por los Houston Texans, equipo en el que permaneció hasta 2019. De ahí pasó a los Cardinals, con los que estuvo hasta el año pasado.
En 10 años de carrera, el cinco veces seleccionado al Pro Bowl acumula 11,298 yardas en 853 recepciones y 71 anotaciones.