Una moda que se destaca por prendas amplias, como chaquetones estampados, así como los bolsos, uno de los productos más exitosos de la firma.
Su director creativo, Kim Jones (1973), ha buceado en la obra de un artista conceptual que conoce y admira. Si su anterior colección se inspiró en el bailarín y coreógrafo Rudolf Nuréyev y, en concreto, en las fotografías que realizara su tío, Colin Jones, en la década de los 60, ahora ha sido la cerámica de Nel la fuente de la que bebe su moda.
En el complejo en el que se halla la iglesia de Val de Grâce, próxima a los jardines de Luxemburgo, los modelos han desfilado sobre una amplia pasarela, junto a seis esculturas de gran tamaño inspiradas en la obra de Hylton Nel.
Entre ellas, se encontraba la de una gata, en cuya espalda rezaba en español: “Nuestra Señora de los Gattos [sic]”.
Además de cómodos chaquetones tres cuartos, se han visto abrigos, trajes -en algunos casos de cuello cerrado con reminiscencias orientales- y pantalones por encima y por debajo del tobillo, junto a 'shorts' evasés.
Los estampados de motivos naturales también han estado presentes, con un tema dominante, la naturaleza, que al igual que las flores, cautivó a Christian Dior (1905-1957), el fundador de la firma. Nuevamente, la combinación de materiales se deja ver, aunque sin estridencias.
Colores otoñales, tonos suaves
La mayoría de colores de los que se ha valido el diseñador británico, más que a la primavera-verano, podrían remitir al otoño. Hay ausencia de vivos, salvo un amarillo. No así de negros, grises, marrones, verdes o azul marino. Tonos suaves, relajados, como los que reinan en la obra de Hylton Nel.
Un "Dior para mis verdaderos amigos" se leía en inglés en el reverso de la invitación al desfile, así como en diferentes prendas y accesorios que se mostraron.
En el apartado de complementos, el rey vuelve a ser el bolso: prácticamente la totalidad de los modelos -han desfilado 48- portaban uno en su mano.
Entre los bolsos a destacar, un revisitado Saddle, cuyas formas recuerdan las de una silla de montar a caballo, y que se ha visto en tres tamaños. Por otro lado, en el plano de los accesorios, las cabezas de la mayoría de modelos mostraban un sencillo gorro.
Coleccionista de cerámicas, lo primero que Jones compró del artista sudafricano fue un plato con el motivo de un perro que le recordaba a Dexter, el suyo. Y que ha rescatado, para "estamparlo" en una de las prendas que se han visto.
El desfile de Dior, el más destacado de la cuarta jornada de la semana masculina del prêt-à-porter de París, ha seducido en su conjunto, con propuestas, sobre todo, para las diferentes etapas del día, más que de la noche.
Mañana, la firma de lujo de origen español Loewe, la gala Hermès y el último desfile del belga Dries Van Noten, que dice adiós a la moda, serán los protagonistas.