La petición de Tokyo Electric Power (TEPCO) es la segunda de este tipo desde el inicio de la tragedia nuclear el pasado marzo al Gobierno japonés, que aprobó el mes pasado un fondo por valor de 891.000 millones de yenes (8.740 millones de euros) para mantener a flote a la eléctrica.
Al margen de la ayuda aprobada por el Ejecutivo, TEPCO espera recibir también unos 120.000 millones de yenes (1.178 millones de euros) del seguro nacional previsto en caso de accidentes nucleares.
A pesar de las ayudas, que suman 1,01 billones de yenes (9.913 millones de euros), TEPCO ha vuelto a solicitar asistencia estatal al no haber previsto el incremento que supone la compensación a las personas que abandonaron voluntariamente la zona tras el inicio de la crisis, informó la agencia local Kyodo.
Basándose en sus nuevas estimaciones, TEPCO prevé que durante este año fiscal, que concluye en marzo de 2012, tendrá que desembolsar cerca de 1,7 billones de yenes (16.685 millones de euros) en indemnizaciones, y la cantidad podría aumentar a 4,5 billones de yenes (44.167 millones de euros) en los próximos dos años.
A causa de la radiactividad, más de 80.000 personas continúan desplazadas a un radio de 20 kilómetros de la central, un área que ha sido declarada zona de exclusión, y ha causado pérdidas millonarias en la industria agrícola, ganadera y pesquera de Fukushima.
El Gobierno tomó la decisión de ayudar a TEPCO con fondos públicos después de que la empresa aceptara reducir en 2,5 billones de yenes (24.537 millones de euros) sus gastos de aquí a los próximos 10 años.
Al margen de los costes de las indemnizaciones, el Ejecutivo nipón prevé que TEPCO tenga que desembolsar cerca de 1,15 billones de yenes (11.287 millones de euros) para desmantelar los reactores dañados, y unos 225.000 millones de yenes (más de 2.280 millones de euros) en descontaminar las zonas afectadas.