"La caída del lucro de la empresa a su menor nivel desde 2004 puede ser explicado por el aumento de la importación de los derivados y a la reducción de los márgenes de ganancia por la comercialización debido a los precios desfasados", aseguró Foster en una teleconferencia con inversores.
Petrobras, la mayor empresa de Brasil, anunció la víspera que su beneficio neto en 2012 fue de 21,182 millones de reales (unos 10,617 millones de dólares), con una caída del 36 por ciento frente al año anterior y el peor resultado en ocho años.
Foster dijo igualmente que los resultados de la empresa se vieron afectados por el impacto de la devaluación del real en los costos de la compañía, por un aumento no previsto de los gastos extraordinarios, por "las pérdidas expresivas" en procesos judiciales y por una menor producción en 2012.
Según la presidenta de Petrobras, con una menor producción por problemas técnicos y un fuerte aumento del consumo en Brasil, la empresa tuvo que elevar las importaciones de derivados desde 749 millones de barriles diarios en 2011 hasta 779 millones de barriles diarios en 2012.
El volumen importado de gasolina saltó en un 112 por ciento.
Las exportaciones de la empresa, por su parte, bajaron en un 13 por ciento, hasta 548 millones de barriles diarios, con lo que el saldo comercial de Petrobras saltó desde un déficit de 118 millones de barriles diarios en 2011 hasta un déficit de 231 millones de barriles diarios en 2012.
Foster dijo igualmente que, pese a que el Gobierno concedió tres reajustes en los precios de los combustibles el año pasado, la diferencia entre el valor de venta en el país aún está muy por debajo del valor internacional del crudo.
Petrobras es una empresa controlada por el Estado por lo que sus precios dependen de decisiones del Gobierno, que mantiene los valores de los combustibles en Brasil desfasados con respecto al exterior para que no impacten en la inflación.
La depreciación del dólar frente al real también contribuyó para aumentar la diferencia entre los precios internos y los del crudo en el mercado internacional.
Foster agregó que, por primera vez en más de una década, la producción de petróleo de la empresa cayó: desde 2.022 millones de barriles diarios en 2011 hasta 1.980 millones de barriles diarios en 2012.
En esa reducción contribuyó la paralización en las operaciones en el campo marino de Frade por un derrame, que redujo la producción en 14,000 barriles diarios. Dicho campo es operado por la multinacional Chevron, pero Petrobras tiene participación en el mismo.
La presidenta de la compañía agregó que, por paralizaciones programadas en algunos pozos para mantenimiento, la producción propia de Petrobras se redujo en 28,000 barriles diarios.
"El año de 2012 fue muy difícil para Petrobras en especial por el mantenimiento", afirmó la ejecutiva al justificar las paralizaciones de algunos pozos por problemas técnicos.
Foster aseguró que, tras el aumento de las inversiones el año pasado y la realización del total de las obras programadas, hay buenas perspectivas para la compañía "a medio y largo plazo".
Según la presidenta, los nuevos reajustes en los precios de los combustibles, la menor presión del cambio y la normalización de la producción en los campos que estaban paralizados garantizan un aumento de la producción y de los ingresos para 2013.