China y Singapur se suman a otros 18 países, entre ellos diez de la Unión Europea (UE), que han "reducido significativamente su volumen de compras de crudo a Irán" y por tanto pueden acogerse a una excepción de las nuevas sanciones, indicó Clinton en un comunicado.
"Como resultado, notificaré al Congreso que las sanciones relativas a la sección 1245 de la ley de gastos de defensa de 2012 no se aplicarán a las instituciones financieras basadas en esos países, por un periodo renovable de 180 días", añadió.
China, el mayor importador mundial de petróleo iraní, ha reducido entre enero y mayo en un 25 por ciento sus compras de crudo a Teherán, y se ha comprometido a hacer un descenso "significativo" durante el resto del año con respecto a 2011, aseguró a periodistas un alto funcionario estadounidense, que pidió el anonimato.
En un comunicado, el ministerio chino de Energía anunció esta semana "un cambio estructural en sus importaciones de crudo, que permitirá continuar esta reducción", añadió el funcionario en una conferencia de prensa telefónica.
Hoy entra en vigor una cláusula de la ley de gastos de defensa firmada por el presidente estadounidense, Barack Obama, el 31 de diciembre de 2011 y que prevé imponer sanciones económicas a las instituciones que incurran en transacciones relacionadas con el petróleo con el Banco Central iraní.
No obstante, esa cláusula permite una excepción para los países que hayan reducido significativamente su dependencia del petróleo iraní, por lo que el gobierno de Estados Unidos debe notificar al Congreso sobre las medidas que cada uno de ellos ha tomado para ese fin.
La exención a China y Singapur, que también se ha comprometido a reducir sus transacciones petroleras con la República Islámica, deja prácticamente vacía la lista de grandes economías sujetas a quedar excluidas del sistema financiero estadounidense en caso de que compren crudo iraní.
Los dos países se suman a los diez europeos (España, Francia, Italia, Grecia, Alemania, Reino Unido, Bélgica, Holanda, Polonia y la República Checa) y a Japón, que quedaron libres poco después de que la UE aprobara su embargo al petróleo iraní, que entrará en vigor este domingo.
Otros siete países -India, Corea del Sur, Malasia, Sudáfrica, Sri Lanka, Turquía y Taiwán- quedaron exentos el pasado 11 de junio.
"Las acciones acumuladas de estos países son una demostración clara al gobierno de Irán de que su continua violación de sus obligaciones internacionales acarrea un costo económico enorme", señaló Clinton en el comunicado.
La titular de Exteriores citó datos de la Agencia Internacional de Energía (AIE) según los cuales las exportaciones de crudo iraní han caído de unos 2.5 millones de barriles diarios en 2011 a apenas 1.5 millones de barriles, "lo que en términos reales significa casi 8,000 millones de dólares en pérdidas cada trimestre".
Por su parte, el alto funcionario estadounidense que habló con periodistas pronosticó que Irán "va a tener cada vez más difícil financiar su comercio", y aseguró que su moneda, el rial, ha perdido alrededor del 40 por ciento de su valor desde noviembre de 2011.
Clinton aseguró que los líderes iraníes "entenderán aún más la urgencia de la situación" cuando entre en vigor el embargo de la UE, e instó a Teherán a demostrar un "compromiso serio" en las negociaciones con el Grupo 5+1 que se reanudan el próximo 3 de julio con una reunión a nivel de expertos en Estambul.
Irán está siendo presionado para que ponga fin a un programa nuclear que, según las potencias occidentales, tiene objetivos militares.