La peculiaridad de este asteroide que se estima fue un cometa que ha perdido su contenido de agua y otros materiales volátiles, es que se asemeja a un enorme cráneo humano.
El anuncio de la nueva visita fue hecho por el astrofísico del Instituto de Astrofísica de Andalucía, España, quien ha estudiado este objeto.
De acerdo a las observaciones, completa un rotación cada 2.94 horas y refleja solo del cinco al seis por ciento de la luz que recibe del Sol, una capacidad de reflexión apenas superior a la del carbón.
En su aproximación de 2018 el 2015 TB145 estará bastante más distante que hace tres años, cuando se acercó a 480 mil kiometros de distancia, unos 95 mil kilómetros más lejos que la Luna.
A pesar de lo lejos, Santos-Sanz dijo que será posible conseguir nueva información que enriquecerá el conocimcieno de ese asteroide y de objetos similares, citó el sitio especializado space.com.