Actualmente, Japón está experimentando varios cambios, como el descenso de la tasa de natalidad y el envejecimiento de la población, así como una mayor concentración de la población en zonas urbanas, con la consiguiente despoblación de las zonas rurales. Además, el país está avanzando en el campo de la tecnología y la informática. En este escenario, Toyota cree que, como entidad empresarial, debe responder de forma amplia y oportuna a la diversificación de las necesidades de los consumidores.
A partir de 2017, Toyota tiene previsto desarrollar y presentar de forma conjunta, por fases, una amplia variedad de servicios centrados en las personas y que puedan incorporar un elemento añadido de Waku-Doki —ilusión y expectación— en las vidas de los clientes japoneses en el futuro.