Durante la presentación de su informe anual de 2013 en Berlín, MSF alertó de que cada vez es más frecuente el intrusismo en el trabajo de las ONG. "Ya no se tiene en cuenta su independencia", aseguró el gerente de MSF Alemania, Frank Dörner.

"También los políticos alemanes mezclan cada vez más la ayuda humanitaria con objetivos políticos y militares", indicó Dörner.

Especialmente grave es la situación en la República Centroafricana, en Sudán del Sur y Siria, donde MSF informó de secuestros y ataques. Se han visto afectados por igual, pacientes, hospitales y voluntarios.

De acuerdo al informe, sólo en la República Centroafricana se registraron en 2013 docenas de incidentes de seguridad y desde finales de 2012, más de 30 asaltos armados. "Esto es totalmente inaceptable", declaró Dörner.

La falta de seguridad tiene consecuencia en la población de esos países. MSF se vio obligada a terminar un programa de ayuda en el verano de 2013 en Somalia tras más de 20 años. "Decenas de clínicas, salas de operaciones y otras instalaciones médicas no pudieron continuar con su trabajo", informó.

MSF Alemania recibió en 2013 más de 82 millones de euros en donativos, un tercio más que hace un año propiciado por catástrofes como el tifón Haiyan en Filipinas. (DPA)