"Menuda carrera, ha sido impresionante. Nunca hay que rendirse", exclamó Hamiton, de 36 años, justo después de ampliar a 101 -tras una sensacional exhibición- su propio récord histórico de victorias en la F1. "El equipo ha hecho un gran trabajo y (su compañero finlandés) Valtteri (Bottas) también, para que yo consiguiese esto. Les estoy muy agradecido", añadió, nada más bajarse del coche, el astro inglés, que arrancó décimo y remontó para firmar su sexto triunfo del año.

"Apreté a tope, creo que ha sido uno de los fines de semanas más duros de mi carrera", comentó el excéntrico y espectacular campeón de Stevenage en la entrevista a pie de pista, que condujo el ex piloto de F1 brasileño Felipe Massa.

"Recuerdo en 2004, en la F3, cuando mi padre (Anthony) me dijo en Bahrein que nunca había que rendirse. Yo iba décimo, acabé cuarto y acabé ganando ese año. Así que esta victoria va dedicada a mi padre. Va por él", indicó 'Sir Lewis', que protagonizó un fin de semana de ensueño, en que se repuso de su descalificación en la cronometrada del viernes: salió último en la prueba sprint del sábado, que acabó quinto; y sufrió cinco puestos de penalización más, al cambiar la cámara de combustión de su Mercedes.

"Antes del fin de semana no pensaba que esto pudiese suceder. Casi todo se nos puso en contra; pero nunca hay que rendirse. Y se lo digo a todo el mundo: nunca dejéis de luchar", comentó el as británico, que ahora suma 318,5 puntos, catorce menos que Verstappen.

"Quiero agradecer el apoyo al público brasileño. No recibía semejante apoyo desde Silverstone. Desde entonces, ha sido difícil, pero aquí me han apoyado durante todo el fin de semana; y les estoy muy agradecido", manifestó Hamilton después de culminar este domingo una exhibición que se prolongó durante todo el fin de semana.