Cuando el Banco Mundial hace un estudio y prevé que Brasil seguirá creciendo y que puede, en 2016, ser la quinta mayor economía del mundo, nos está colocando un desafío", afirmó Lula en su programa "Desayuno con el presidente".
De acuerdo con el mandatario, el crecimiento de la economía brasileña exige un aumento en el crédito y una reducción en los impuestos sobre los productos que consumen los brasileños.
"Tenemos que estar conscientes de que necesitamos ofrecer más crédito y necesitamos, en la medida que sea necesario, ofrecer exenciones en sectores que lo necesiten, porque lo que necesitamos es incentivar a la población brasileña a comprar lo que aún no tiene", afirmó.
El presidente explicó que, en la medida en que la población va adquiriendo bienes como vivienda y automóvil, va permitiendo que la economía siga creciendo.
El crecimiento económico brasileño en los últimos años ha sido sustentado principalmente por el aumento de la demanda interna gracias a la caída del desempleo y al crecimiento del poder de compra de la población.
Brasil es actualmente, por el volumen de su Producto Interno Bruto (PIB), la novena mayor economía del mundo y la primera de América Latina.
Para ascender hasta el quinto lugar entre las mayores economías del mundo, Brasil tendrá que desplazar a potencias como Francia, Reino Unido, Rusia y Alemania, para poder ubicarse después de Estados Unidos, China, Japón e India.