"Vamos a encargar antes de fin de año un nuevo lote de Ariane-5", explicó Israël, en una conferencia de prensa durante el Salón Aeronáutico y del Espacio de Le Bourget, al norte de París, en la que indicó que discute con el fabricante Astrium (filial de EADS) un pedido para 19 unidades de esa lanzadera.
Preguntado sobre Vega, respondió que las discusiones con su socio italiano son para cinco unidades de ese cohete de capacidad de carga más reducida.
Su intención -precisó- es elevar la cadencia de lanzamientos de Vega a tres anuales a partir de 2015 (serían dos en 2014) y llegar también a ese ritmo de tres al año con Soyuz desde la base de Kurú, en la Guayana francesa.
Un Soyuz que despegará desde Kurú el próximo 24 de junio (el quinto que lo hará desde allí) debe poner en órbita los cuatro primeros satélites de la constelación O3b, dedicado a ofrecer señal a regiones ecuatoriales poco cubiertas en servicios de telecomunicaciones.
Israël se felicitó del quincuagésimo quinto éxito consecutivo en el lanzamiento de un Ariane-5 en la noche del 6 al 7 de mayo pasado, en una misión para el carguero europeo "Albert Einstein", que se acopló una decena de días después a la Estación Espacial Internacional.
Pero al mismo tiempo hizo hincapié en que se necesita "rápidamente una adaptación de Ariane-5" de forma que pueda transportar cargas con más volumen y más pesadas, algo que espera que esté listo para 2015 y que, según sus estimaciones, tendrá un "coste módico" de una treintena de millones de euros.
Arianespace ha programado en total durante este año una decena de lanzamientos desde Kurú. EFE