En una sala recubierta de andamios, sobre un fondo de rayos blancos y grises rosáceos, Slimane presentó unas propuestas arriesgadas, adolescentes y frescas en la que es su primera visión del armario femenino para la temporada de frío.
Este desfile causó sorpresa entre los presentes y las redes sociales no tardaron en reprochar a Slimane su distanciamiento de las líneas distintivas de la casa fundada por Yves Saint Laurent al concebir una colección "grunge".
Tras unos sonidos iniciales que hicieron retumbar la estancia, cual bombardeo, con sirenas y explosiones, apareció la primera modelo, con un vestido negro de destellos dorados y cinturón fino, cubierto por una chaqueta de tartán.
El rock se fue intercalando entre los diseños a través del cuero negro que construía minifaldas con cremalleras plateadas o hebillas, pantalones pitillo completamente desgarrados, chupas revisitadas y abrigos.
Los vestidos cortos, ligeros y en estampados liberty de flores quedaron cubiertos por camisas de franela con cuadros, estilo leñador, con botas de cuero de corte militar.
Un cárdigan en azul cielo con estrellas negras, un vestido de cuadros rojos con falda de tablas que emulaba un uniforme escolar o una chaqueta de punto de jacquard representaron el lado más infantil.
Las medias de rejilla con cristales brillantes, que en algunos modelos también cubrieron los brazos, imprimieron rebeldía, al igual que los voluminosos abrigos de pieles.
Los bordados realzaron una colección que contó con transparencias, lazos en el cuello del vestido o camisa y pronunciados escotes en V.
Una minifalda vaquera desgarrada, unos "shorts" extremadamente cortos y un abrigo con estampado de leopardo estuvieron entre los diseños más radicales de Slimane.
En primera fila, las actrices hollywoodienses Kirsten Dunst y Jessica Chastain descubrieron esta tercera colección del modisto franco-italo-tunecino para Saint Laurent.
Entre los íntimamente vinculados al fundador de la "maison" estaban Pierre Bergé, el que fue su compañero, y la musa de Yves Saint Laurent, la actriz Catherine Deneuve.
Aunque el negro actuase como hilo conductor también tuvieron cabida el rosa palo, el celeste, el rojo encendido y el azul oscuro.
Mañana llega el turno del prêt-à-porter otoño-invierno de Chanel y de otras firmas como Agnès B. o Fatima Lopes, en la penúltima jornada de la Semana de la Moda de París.