BMW, que había sufrido en 2008 la primera caída de las ventas en 15 años por la intensificación de la crisis financiera, informó hoy que su marca principal incrementó el pasado ejercicio las ventas un 11.6 por ciento, hasta 1,540,085 unidades.
El pasado ejercicio las de la marca MINI subieron un 5.8 por ciento (301,526 vehículos) y las de Rolls-Royce mejoraron un 1 por ciento (3,575 unidades), frente a 2011.
BMW destacó que las tres marcas registraron cifras de ventas récord y que la compañía fortaleció su posición como abastecedor líder de vehículos de lujo en todo el mundo.
Las ventas del grupo subieron en diciembre un 14.8 por ciento, hasta 181,571 unidades.