Luego de una actuación de 29 puntos y 10 asistencias, Carla Cortijo, número ocho en su casaca y fue para muchos la jugadora más valiosa del partido, se sintió con una gran felicidad luego de haber obtenido el oro panamericano.
“Significa mucho para mí, no fue fácil, la fanaticada, los árbitros, pero para mí es algo sin igual ganar un panamericano y creo que hablo por el equipo también”, comentó Cortijo.
Cuando el público abucheaba a la jugadora isleña, está les mostraba la jersey de Puerto Rico jalándolo de su pecho; “Esto se trata de concentrarte en ti mismo y seguir jugado, con mis señas quería que todos vieran que con orgullo represento a mi país”.
Le dedico a mis abuelos esta medalla de oro, no puedo expresar lo que siento ahora mismo porque me es imposible con palabras, es un gran sentimiento” apuntó la jugadora.
Respecto al primer partido que sostuvieron contra México, comentó: “Creo que estuvimos más enfocadas y con más energía a diferencia del primer juego contra ellas”.
Acerca de cómo se prepararon para la final, Carla comentó: “nos preparamos desde anoche mentalmente, durmiendo bien, comiendo bien. Tal vez la comida mexicana me ayudó”, dijo bromeando con la prensa panamericana.
Por su parte, el entrenador Omar González se mostró satisfecho por lo hicieron sus pupilas, a lo que comentó: “el trabajo que ellas han hecho ha sido muy bonito, todo esto se lo dedico a ellas mismas, porque estas niñas han trabajado muy duro y mucha gente no se dio cuenta de eso”.
“A veces las cosas no están muy bien en Puerto Rico, por eso el triunfo también es para ellos, simplemente nosotros entrenamos para darle estos momentos buenos a nuestro país, para que se lo disfruten ellos”.
En comparación a la derrota sufrida ante México en la ronda preliminar, enfatizó que la diferencia fue que en el primer juego descuidaron un poco la defensa, “creo que salimos un poco flat en la y dejamos muy libre la línea de tres puntos. Hoy, de todos los tiros de tres que hizo México, fue con la mano en la cara, y eso marcó la diferencia”.