La cautela de los consumidores ante la persistente debilidad de la economía estadounidense y el paso del huracán "Irene" por la costa este del país, que obligó a algunos concesionarios a cerrar el pasado fin de semana, habían hecho temer a los expertos unos malos resultados para agosto.
Pero las cifras difundidas hoy por los fabricantes hablan por sí solas y desde luego no son malas.
Las ventas de General Motors (GM) sumaron 218,479 vehículos, un 18 por ciento más que en agosto de 2010, impulsadas por la buena aceptación de su modelo compacto Chevrolet Cruze, la SUV Chevrolet Equinox y el GMC Terrain, informó el fabricante estadounidense.
"Nuestro equilibrado portafolio de camionetas y vehículos eficientes como Chevrolet Cruze, Chevrolet Equinox y GMC Terrain está ayudando a GM a seguir incrementando las ganancias, que han aumentado en siete de los ocho últimos meses", explicó Don Johnson, vicepresidente de ventas en Estados Unidos.
Según Johnson, GM está atravesando "un buen momento" y es "cautelosamente optimista" sobre una mejora del crecimiento económico de Estados Unidos en los próximos meses.
Por su parte, el grupo estadounidense Ford aumentó sus ventas un 11 por ciento, hasta 175,220 unidades, gracias a que la demanda de sus todoterrenos creció un 49 por ciento y a que la marca de lujo Lincoln tuvo también un incremento importante (25 por ciento).
"Los consumidores valoran la eficiencia y tecnología de nuestros nuevos todoterrenos", señaló en el comunicado el vicepresidente de Ford para ventas en Estados Unidos, Ken Czubay.
Los mejores resultados fueron para la también estadounidense Chrysler, ahora controlada por la italiana Fiat y que vendió en agosto 130,119 vehículos, un 31 por ciento más que en el mismo mes de 2010.
Según precisó la compañía, fue el mejor agosto en ventas desde 2007 y el decimoséptimo mes de crecimiento consecutivo, debido especialmente a las ventas de jeeps y minivans.
En cuanto a Toyota, cuya producción en Norteamérica se ha visto afectada gravemente en los últimos meses por la interrupción del suministro de componentes tras el terremoto y tsunami que padeció Japón el pasado 11 de marzo, sus ventas bajaron un 12.7 por ciento.
El gigante japonés vendió en agosto 129,483 unidades frente a las 148,388 del mismo mes de 2010 y algunos de sus modelos más populares, como el Corolla y el híbrido Prius, registraron bajas cercanas al 20 por ciento.
"Nuestra perspectiva sobre los suministros continúa mejorando y la producción en Norteamérica retornará al 100 por ciento a sus niveles normales este mes", anotó en un comunicado Jeff Bracken, vicepresidente de la división de ventas de Toyota.
El también japonés Honda Motor anunció que vendió 82,321 vehículos, un 27.2 por ciento menos que un año antes.
Las "limitaciones" en la producción causadas por el desastre en Japón "afectaron adversamente" a las ventas de agosto, argumentó la empresa en un comunicado.
Nissan, otra japonesa, sí logró buenas cifras y vendió 91,541 frente a 76,827 de un año antes, con un incremento del 19.2 por ciento.
Mientras, la alemana Volkswagen informó de 25,232 unidades vendidas en Estados Unidos el mes pasado, lo que representa una subida del 10.4 por ciento frente a agosto de 2010.
Las surcoreanas Kia y Hyundai siguieron también en agosto con los buenos resultados de los últimos meses.
La primera anunció que este agosto fue el mejor de su historia en Estados Unidos, con 41,188 unidades vendidas (un 26.9 por ciento más que hace un año), y el duodécimo mes consecutivo de cifras récord.
"Kia ha logrado ventas récord cada mes durante un año completo y se ha convertido en una de las compañías automovilísticas de más rápido crecimiento en Estados Unidos", subrayó el fabricante en un comunicado.
En cuanto a Hyundai, vendió 58,505 vehículos en agosto, un 9.1 por ciento más que hace un año pero un 1.8 por ciento menos que en julio.